LAS TANGAS, DONDE NACIERON LAS AUTODEFENSAS DE CÓRDOBA Y URABÁ, ES MANEJADA POR VICENTE
Finca que Fidel ofreció a campesinos nunca salió de manos de los Castaño


‘Los tangueros’ se llamó el primer grupo paramilitar creado por los hermanos Castaño. Entre 1990 y 1991 encontraron en esa hacienda de Córdoba 29 muertos y hoy siguen buscando víctimas. Tiene 6.000 hectáreas, que deberían destinarse a reparación.


En las sabanas entre Montería y Valencia (Córdoba), a orillas del Sinú, prospera Las Tangas, una hacienda de casi 6.000 hectáreas en la que pastan 2.600 novillos de ceba y verdean los pastos y los cultivos de maderables.


Los más jóvenes la ven como uno de los símbolos de la riqueza de esas tierras ganaderas, que también se refleja en la imponencia de ‘La mayoría’, como le dicen a la casa principal de la hacienda.


Los que tienen más memoria, sin embargo, pueden contar la historia oscura de esa finca, que a finales de los 80 fue cuna de los grupos paramilitares de Córdoba y Urabá.


‘Los tangueros’ se llamó la primera banda formada por los hermanos Castaño. Se dice que en esa finca aún están enterradas decenas de sus víctimas (entre 1990 y 1991 encontraron 29 cadáveres), y de allí salieron los ‘paras’ que realizaron al menos 20 masacres en los pueblos de la región entre 1988 y 1990.


Por una de esas matanzas, la de Pueblo Bello, Colombia fue condenada recientemente por la Corte Interamericana de Derechos Humanos a pagar una indemnización de 12.500 millones de pesos.


Pero casi 20 años de historia criminal y decenas de testimonios sobre su condición de cuartel paramilitar no han servido para que el Estado busque la extinción de dominio. El ‘patrón’ de esas tierras es Vicente Castaño, el hermano mayor del clan, que de vez en cuando se aparece para supervisar los proyectos productivos. Un lote de búfalos es el último de ellos.


Y es que a pesar de que en 1991 Fidel Castaño, ‘Rambo’, entregó centenares de hectáreas de sus fincas Las Tangas y Jaraguay para los desmovilizados del Epl, en la región se dice que la familia del fundador de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá y otros jefes ‘paras’ recuperaron muchos predios.


‘Rodrigo’, jefe del ‘Bloque Metro’ y disidente de las Auc, antes de ser asesinado por los mismos paramilitares, denunció que con la unión a los narcos comenzó una ‘contrarreforma agraria’.


Llegó a decir que compraron a la fuerza o pagando altas sumas cerca de 10.000 hectáreas que ‘Rambo’ había repartido entre los campesinos.


Unos labriegos vendieron de nuevo a sus antiguos propietarios. Otros ingresaron a las filas ‘paras’ –con el ‘Bloque Bananero’ se desmovilizaron unos 40 ex guerrilleros del Epl– y dejaron abandonados los terrenos que les entregaron: en promedio, cuatro hectáreas. Algunos siguen explotándolas y defienden la actuación de los Castaño.


Lo cierto es que Las Tangas aparece en la lista de predios que deberían destinarse a compensar a las víctimas. Sobre todo después de la sentencia de la Corte Constitucional sobre la Ley de Justicia y Paz, que obliga a los ‘paras’ a reparar incluso con bienes que no fueron adquiridos de manera ilegal.

Una hacienda ligada a las matanzas en Córdoba y Urabá

Las Tangas fue al paramilitarismo en Córdoba y Urabá lo que ‘Nápoles’, la finca de Pablo Escobar en el Magdalena Medio, al narcotráfico.

Allí funcionaron, a mediados y finales de los 80, escuelas de mercenarios extranjeros contratados por ‘paras’ y narcos.

La masacre de Pueblo Bello, un caserío de Turbo (Urabá antioqueño), en enero de 1990. está directamente relacionada con la finca.

No solo porque de allí salieron los 60 ‘paras’ de Fidel Castaño que la llevaron a cabo, sino por las mismas razones de la matanza.

Según pruebas y testimonios que fueron avalados por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que condenó a Colombia por el caso, los Castaño ordenaron la muerte de 42 personas por el robo del mismo número de reses y por la muerte del mayordomo de Las Tangas.

En varios operativos, la Fiscalía encontró en Las Tangas cerca de 30 cadáveres. Seis de ellos eran de los desaparecidos de Pueblo Bello. Hace unos meses reanudó la búsqueda. Al menos otras 7 masacres (88 muertos entre 1988 y 1990) se habrían planeado o ejecutado en Las Tangas.

Una parte para ayuda

Las Tangas, pese a su pasado, también es vista en Córdoba como modelo de un programa piloto de la Corporación Colombia sin Hambre, que a través de la vinculación de varios hacendados entrega parcelas a campesinos sin tierra. En esa finca se concentra el mayor número de familias favorecidas, 184, cuyo principal compromiso es someterse a cultivar con métodos orgánicos. "El objetivo es garantizar la seguridad alimentaria a los campesinos. Les damos la tierra en comodato para que la cultiven y se beneficien", afirma Alfonso Osorio, un promotor del proyecto. Hace unos años, Las Tangas hizo parte de los planes de Funpazcor, Fundación para la Paz de Córdoba, promovida por los Castaño.

‘Rodrigo’ denunció

"Si Fidel se volviera a levantar de su tumba, volvería a caer en ella al ver que 'Don Berna', el sucesor de Pablo Escobar, es dueño de todas las tierras que él les repartió a los campesinos".

‘Rodrigo’, jefe del Bloque Metro, antes de ser asesinado.