N del E: Este articulo de revista Semana, revela como el Narcotrfico atacó al Bloque Metro, en una operación envolvente coordinada con varios batalones del ejercito: Un vergonzoso espectaculo de verdadero PARAMILITARISMO.
Semana
Bogota - Edición No. 1117
26 de setiembre de 2003
CONFLICTO
La cacería
Cerca de 2.000 hombres de cuatro grupos de autodefensas
persiguen desde hace varias semanas al comandante del Bloque
Metro y sus hombres para matarlos. ¿Qué desató esta guerra
entre paramilitares?
La noticia llego con los desplazados. Ni el Ejército, ni la Policía, ni
la Defensoría del Pueblo, ni ninguna entidad del gobierno sabían lo
que está pasando desde hace dos semanas en el municipio de
San Roque y sus alrededores, en el nororiente de Antioquia. El
Estado y el resto del país se enteraron de lo que está ocurriendo,
a escasos 108 kilómetros de Medellín, cuando más de 600
campesinos, 290 de ellos niños, escaparon de las veredas La
Mora, Chorro Blanco, San Juan y El Táchira y llegaron el lunes
pasado hasta el casco urbano de San Roque para salvar sus vidas.
A comienzo de la semana el comandante de la Brigada 14 del
Ejército, general Edgar Ceballos, dijo que desde el fin de semana
pasado comenzó a movilizar tropas hacia la zona rural para
recuperar el control y permitir el retorno de los labriegos. Aunque el
Ejército llegó a la vía de entrada del municipio y creó un cordón de
seguridad alrededor del pueblo, la petición de los campesinos a lo
largo de la semana fue que los militares llegaran hasta la zona de
los enfrentamientos a ponerle fin a los combates. A pesar de que
la intensidad de la contienda descendió con el paso de los días,
para el viernes pasado la cifra de desplazados llegó a 736
personas.
Desde el pasado 15 de septiembre varias de las veredas que
rodean ese municipio del noreste antioqueño se transformaron en
el escenario de combates entre miembros de las autodefensas del
Bloque Metro y fuerzas combinadas de cuatro facciones de
paramilitares. Desde ese día cerca de 1.500 hombres de los
bloques Cacique Nutibara, Calima, Mineros y Héroes de Tolová
ingresaron a la región por la zona de Santo Domingo y Jaguas.
Otros 500 hombres del Bloque Central Bolívar llegaron por el
municipio de Caracolí para tratar de rodear a los cerca de 500
miembros del Metro (ver mapa). El objetivo de la ofensiva
paramilitar es quitarle el territorio que le queda a ese bloque y, de
paso, matar a su comandante.
¿Y quien es el?
Conocido con el alias de 'Rodrigo Franco' o 'Doble Cero', este
hombre de 38 años de edad, el jefe del Bloque Metro es
considerado como uno de los más veteranos miembros del
movimiento paramilitar en el país. Su verdadero nombre es Carlos
Mauricio García y en 1989, cuando era capitán del Ejército,
abandonó su carrera militar para convertirse en el ayudante
personal de Fidel Castaño Gil. Durante años fue su hombre de
confianza y junto con Carlos y Vicente Castaño Gil hacen parte de
los fundadores de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y
Urabá (Accu).
'Rodrigo' comenzó a operar en el noreste de Antioquia y a
mediados de los años 90 empezó a expandir su presencia
paramilitar hacia algunas zonas del área metropolitana de
Medellín, especialmente en las comunas. Por medio del terror, de
las muertes selectivas y las masacres se ganó un espacio a
sangre y fuego. Sin embargo, desde 1998, cuando las AUC
profundizaron su relación con el narcotráfico, comenzó a alejarse
de la cúpula del movimiento para crear la que es considerada
como una disidencia paramilitar.
Públicamente 'Rodrigo' comenzó a cuestionar y a denunciar los
vínculos de algunos comandantes de las AUC con el narcotráfico y
a afirmar que él y sus hombres estaban en desacuerdo con
relacionar el movimiento paramilitar con los narcos. Desde ese
momento comenzó a tener los primeros roces con otros miembros
de las autodefensas con estrechos lazos con la mafia,
particularmente con 'Adolfo Paz', o 'Don Berna', el comandante del
Bloque Cacique Nutibara, que también tenía presencia en Medellín.
Las denuncias de 'Rodrigo' en contra de lo que denominó la
"narcotización" de las autodefensas, y en especial sus reiterados
ataques a 'Adolfo Paz', quien en el organigrama de las AUC funge
como inspector general, le comenzaron a generar serias
rivalidades. Estas terminaron desatando una guerra en las
comunas de la capital paisa, la cual dejó decenas de muertos
pertenecientes a los bloques Metro y Cacique Nutibara, y
centenares de víctimas civiles.
La relación de 'Rodrigo' con el resto de los bloques de los
paramilitares se agravó aún más en septiembre del año pasado
cuando declaró oficialmente que el Bloque Metro era una
disidencia de las autodefensas. Esto ocurrió justo en un momento
en el que Castaño y otros comandantes paras estaban tratando de
consolidar y presentar ante la opinión pública a unas autodefensas
reunificadas. Algo que no consiguieron. Durante los siguientes
meses las relaciones no fueron las mejores y en la disputa
territorial en Medellín con el Bloque Cacique Nutibara no encontró
apoyo de otras estructuras de las autodefensas y terminó
perdiendo con esta facción los espacios que había ganado. Pero
su situación con las AUC no había llegado aún a su punto más
crítico.
En mayo de este año 'Rodrigo' y los hombres del Bloque Metro
pasaron de ser considerados como un grupo de "rebeldes" a ser
calificados abiertamente como enemigos por sus antiguos aliados.
La razón fue la negativa de 'Rodrigo' a Carlos Castaño cuando éste
le exigió entrar a la mesa de acercamientos con el gobierno
nacional. 'Rodrigo' rechazó la idea y solicitó una mesa de
conversaciones distinta con el argumento de que no se unirá a
grupos que, según él, sólo les interesa el narcotráfico.
La gota que rebosó la copa, y que parece ser una de las razones
que explican la ofensiva a gran escala que se libra en su contra
desde hace dos semanas en los alrededores de San Roque, tiene
que ver con un nuevo y sorpresivo anuncio a finales de agosto
pasado. En éste 'Rodrigo' expresa su intención de comenzar a
negociar con el gobierno en una mesa paralela. Aunque la decisión
del jefe para no fue comunicada oficialmente al alto comisionado
para la Paz, Luis Carlos Restrepo, en una carta fechada el 19 de
septiembre, conocida en San Roque el lunes pasado, 'Rodrigo' le
ratifica al presidente Alvaro Uribe su voluntad de sentarse en una
mesa de diálogo "diferente a la mesa del narcotráfico", en alusión
a los grupos 'paras' que actualmente adelantan conversaciones
con el gobierno nacional.
La intención de negociar por separado cayó como un baldado de
agua fría en las altas esferas de las AUC. Consideran que el
propósito de 'Rodrigo' al intentar negociar no sólo es salvarse de
una derrota militar, sino torpedear el proceso que adelantan ellos
en otras mesas y atomizaría, aún más, la negociación. Para
algunos de ellos el eventual ingreso de 'Rodrigo' y sus hombres a
la negociación terminaría estableciendo una especie de división en
dos grupos: el de los 'paras buenos', aquellos que no tienen
vínculos con el narcotráfico, dentro de los que estaría 'Rodrigo', y
los 'paras malos', aquellos con relaciones con los narcos, en
donde están los demás. Las posibles consecuencias que este
hecho acarrearía para el proceso es algo que algunos no están
dispuestos a averiguar. Y por eso han decidido cortar de raíz el
problema: eliminar a 'Rodrigo'.